as tormentas de Luis. (www.astormentas.com)

Poema ao acaso


Quem não tem namorado é alguém que tirou férias não remunerada de si mesmo. Namorado é a mais difícil das conquistas. Difícil porque namorado de verdade é muito raro. Necessita de adivinhação, de pele, saliva, lágrima, nuvem, quindim, brisa ou filosofia. Paquera, gabiru, flerte, caso, transa, envolvimento, até paixão, é fácil. Mas namorado, mesmo, é muito difícil.
Namorado não precisa ser o mais bonito, mas ser aquele a quem se quer proteger e quando se chega do lado dele a gente treme, sua frio e quase desmaia pedindo proteção. A proteção não precisa ser parruda, decidida ou bandoleira: basta um olhar de compreensão ou mesmo de aflição.

Quem não tem namorado é quem não tem amor, é quem não sabe o gosto de namorar. Há quem não sabe o gosto de namorar... Se você tem três pretendentes, dois paqueras, um envolvimento e dois amantes, mesmo assim pode não ter nenhum namorado. Não tem namorado quem não sabe o gosto da chuva, cinema sessão das duas, medo do pai, sanduíche de padaria ou drible no trabalho. Não tem namorado quem transa sem carinho, quem se acaricia sem vontade de virar sorvete ou lagartixa, é quem ama sem alegria. Não tem namorado quem faz pacto de amor apenas com a infelicidade. Namorar é fazer pactos com a felicidade ainda que rápida, escondida, fugida ou impossível de durar. Não tem namorado quem não sabe o valor de mãos dadas, de carinho escondido na hora em que passa o filme, de flor catada no muro e entregue de repente, de poesia de Fernando Pessoa, Vinícius de Moraes ou Chico Buarque lida bem devagar, de gargalhada quando fala junto ou descobre a meia rasgada, de ânsia enorme de viajar junto para a Escócia ou mesmo de metrô, bonde, nuvem, cavalo alado, tapete mágico ou foguete interplanetário.

Não tem namorado quem não gosta de dormir agarrado, de fazer cesta abraçado, fazer compra junto. Não tem namorado quem não gosta de falar do próprio amor, nem de ficar horas e horas olhando o mistério do outro dentro dos olhos dele, abobalhados de alegria pela lucidez do amor. Não tem namorado quem não redescobre a criança própria e a do amado e sai pelos parques, fliperamas, beira d’água, show do Milton Nascimento, bosques enluarados, ruas de sonhos ou musical da metro. Não tem namorado quem não tem música secreta com ele, quem não dedica livros, quem não recorta artigos, quem gosta sem curtir, quem curte sem aprofundar. Não tem namorado quem nunca sentiu o gosto de ser lembrado de repente no fim de semana, na madrugada, ou meio-dia do dia de sol em plena praia cheia de rivais. Não tem namorado quem ama sem se dedicar, quem namora sem brincar, quem vive cheio de obrigações; quem faz sexo sem esperar o outro ir junto com ele. Não tem namorado quem confunde solidão com ficar sozinho e em paz. Não tem namorado quem não fala sozinho, não ri de si mesmo e quem tem medo de ser afetivo. Se você não tem namorado porque não descobriu que o amor é alegre e você vive pesando duzentos quilos de grilos e medos, ponha a saia mais leve, aquela de chita e passeie de mãos dadas com o ar.

Enfeite-se com margaridas e ternuras e escove a alma com leves fricções de esperança. De alma escovada e coração estouvado, saia do quintal de si mesmo e descubra o próprio jardim. Acorde com gosto de caqui e sorria lírios para quem passe debaixo de sua janela. Ponha intenções de quermesse em seus olhos e beba licor de contos de fada. Ande como se o chão estivesse repleto de sons de flauta e do céu descesse uma névoa de borboletas, cada qual trazendo uma pérola falante a dizer frases sutis e palavras de galanteria.

Se você não tem namorado é porque ainda não enlouqueceu aquele pouquinho necessário a fazer a vida, para de repente parecer que faz sentido. ENLOU-CRESÇA.


quarta-feira, 10 de fevereiro de 2010

TIMOshenko se dice timada:


no admite su derrota en las presidenciales de Ucrania




Su partido anuncia que impugnará los resultados de los comicios que dieron la victoria a Yanukóvich
Políticos de distinto signo apremian a la primera ministra a que reconozca que ha perdido en las urnas
Autor: Boris Klimenko Fecha de publicación: 10/2/2010

Pese a las presiones de políticos de distinto signo, la primera ministra Yulia Timoshenko no se rinde y se prepara para impugnar en los tribunales los resultados de la segunda ronda de las elecciones presidenciales ucranianas, que según datos preliminares le dieron la victoria a su rival, el opositor Víctor Yanukóvich (48,94% frente al 45,48%). Nunca «reconoceré la legitimidad de la victoria de Yanukóvich», declaró en una reunión la noche del lunes con los diputados de su partido, según el diario Ukrainska Pravda.


«Se tomó la decisión de impugnar los resultados por colegios, luego exigir un recuento por circunscripciones y si los tribunales nos dan la razón, cuestionaremos los resultados generales», declaró la número dos del Bloque de Yulia Timoshenko (BYT), la diputada Elena Shústik. Aseguró que hay pruebas de las irregularidades en muchos colegios. Además, el 5,6% de los votantes emitió su sufragio en su propio domicilio sin contar con los certificados médicos respectivos, situación que se observó en el feudo de Yanukóvich.
No obstante, la diputada admitió que la revisión de los resultados no necesariamente significará la repetición de la segunda vuelta de las elecciones.
Hasta ahora, Timoshenko, icono de la revolución naranja, no ha comentado en público los resultados, pero nada más cerrarse los colegios electorales, cuando los sondeos dieron como ganador a Yanukóvich, hizo un llamamiento a sus partidarios a luchar por cada voto. «Hay que defender cada protocolo, cada acta, cada voto, porque un voto puede decidir el destino del país», dijo la noche del domingo la primera ministra, que el lunes aplazó, y luego canceló, una rueda de prensa.


Contra los observadores
El jefe de su campaña, Alexánder Turchínov, declaró que las elecciones fueron «unas de las más sucias» y que no se pudo evitar que hubiera «falsificaciones importantes», pese a que los observadores internacionales concluyeron que los comicios cumplieron con los estándares democráticos, y pese a los elogios y felicitaciones de Rusia, Estados Unidos y Francia.
Dirigentes del Partido de las Regiones, la formación de Yanukóvich, se han mostrado sorprendidos por la reacción de Timoshenko. «Ha perdido la cabeza: no reconoce la opinión de los observadores internacionales. Es un sinsentido. Con ello, pone un gordo punto final a su carrera», declaró Nikolái Azárov, diputado de esa formación. Hoy se publicarán los resultados oficiales y los seguidores de Yanukóvich celebrarán la victoria.

- bemsalgado: Estaba cantado.


Las revoluciones de colores destiñen en todas partes
Las protestas populares han fracasado en Ucrania, Georgia, Serbia y Kirguistán
Autor: Miguel A. Murado Fecha de publicación: 10/2/2010

No es solo que el naranja ya no sea el color de moda en Ucrania. También las otras revoluciones de colores, como se les conoce en el argot político, han desteñido en pocos años. El balance de lo que fue todo un fenómeno de la primera mitad de la década no podía ser más decepcionante. La de Serbia ha acabado abriendo la puerta al nacionalismo de extrema derecha, que es hoy la primera fuerza parlamentaria. La revolución rosa georgiana, que en el 2003 aupó al poder a Mijaíl Saakashvili, se ha hundido en la corrupción, las persecuciones políticas y una desastrosa guerra contra Rusia. En Kirguistán, el héroe de la revolución de los tulipanes del 2005, Kurmanbek Bakiyev, se ha visto envuelto en muertes sospechosas de parlamentarios de la oposición y ha llevado al país a lo más bajo de la tabla en corrupción y libertad de prensa.
Y sin embargo hubo un tiempo en que las revoluciones de colores llegaron a parecer el atajo más rápido hacia la democracia. La técnica se repetía casi al milímetro en los distintos países: reunión de todos los opositores en una plataforma cívica, elección de un color o una flor que sirviese de símbolo neutro para políticos a menudo de signo opuesto, denuncias preventivas de fraude electoral? La noche de las elecciones se difundía una encuesta que otorgaba la victoria a la oposición, con lo que al darse a conocer los resultados oficiales la prensa internacional los consideraba fraudulentos sin que nadie viese la necesidad de comprobarlo. A esto seguía el cerco del parlamento o el palacio presidencial por manifestantes que reclamaban la repetición de los comicios. En sociedades inestables, donde el descontento es generalizado, no era difícil atraer multitudes a las protestas, pero su organización no era completamente espontánea, sino que recaía en grupos de jóvenes activistas creados casi de la noche a la mañana. En Serbia se llamaron Otpor, en Ucrania Pora, en Georgia Kmara y en Kirguistán Kelkel. Sus estructuras, métodos y hasta diseños gráficos prácticamente idénticos no disimulaban apenas el hecho de que detrás estaba la agencia norteamericana de cooperación USAID, que formaba a sus líderes con cursillos y los financiaba bajo el epígrafe de «promoción de la democracia». Fue algo así como un calco proamericano de las viejas estrategias de agitprop de la Internacional prosoviética. Los periodistas se encontraban con frecuencia a sus líderes en varias revoluciones distintas, pero se pensaba que el fin acabaría justificando los medios.
No ha sido así. En la facilidad para tomar el poder se ocultaba el pecado original que luego ha impedido gobernar bien. La base demasiado amplia de las plataformas opositoras promocionó invariablemente a antiguos miembros de la nomenclatura como Yúshchenko o Saakashvili, mientras que el apoyo acrítico de Occidente creó una impunidad que ha acabado favoreciendo el autoritarismo y la corrupción. Si hay una lección que se puede extraer de las revoluciones de colores es que la democracia no admite atajos. Ni tiene un color determinado.

- bemsalgado: Eu diría algo moi parecido senon o mesmo, mas pior dito.

Fotos: Sergei Chirikov - EFE - Textos: lavozdegalicia

Sem comentários:

Enviar um comentário